Erase una vez una torta de chocolate, esta fue hecha especialmente para el cumpleaños de Manuel un niño de 5 años, su sabor favorito era el chocolate y esta torta era exactamente lo que deseaba, se veía tan deliciosa que con sólo contemplarla podías saborearla.
Lo que Manuel no sabía es que esta torta no quería que se la comieran, ella no quería que su vida terminara así, apenas acababa de salir del horno. Cada niño de la fiesta miraba la torta como samuro a la carroña.
La fiesta transcurrió rápidamente. O bueno todo transcurre rápido cuan está predestinado a morir prematuramente como era el caso de la torta. Los niños corrieron jugaron pero finalmente el momento llego. Las luces se apagaron haciendo el ambiente más lúgubre, todos rodeando la torta como vándalos preparados para atacar, lo primero que ella supo es que unos palos encendidos la atravesaban llenándola de un calor infernal, todos empezaron a vociferar alaridos parecidos a maullidos de gatos. “¿Es qué matarla no era suficiente?” Pensó la torta. Las notas discordantes cesaron, todos se abalanzaron sobre Manuel abrazándolo y felicitándolo mientras su madre con cuchillo de carnicero laceraba la torta, ella grito sin voz mientras pedazo a pedazo fue cortada, como cerdos con lujuria de carne, los niños se comieron sus partes desapareciendo el cadáver.
;___; pobre torta...
ResponderEliminarAunque no culpo al niño xD
Lograste algo que nunca habría imaginado que sentiría: lástima por una torta.
ResponderEliminarSigue así :3.
PD: Has mejorado bastante tu ortografía ^^.
La profe Gloria te cae bien? xD
ResponderEliminarSii XD Es un amor
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